Es una técnica de mínima invasividad de la columna, en la cual se utiliza un endoscopio para el tratamiento de hernia de disco lumbar (discos protruidos, extruidos o degenerados), que no han tenido respuesta al manejo medico y que causan sintomatología neurológica. El endoscopio es la llave de acceso para que el cirujano extraiga un disco herniado. A través de una pequeña incisión en la piel (1-2 cms), músculos y tejidos blandos son separados sin ser cortados para llegar al disco. Esto produce menos destrucción del tejido, menos dolor postoperatorio, recuperación mas rápida, rehabilitación temprana y evita anestesia general del paciente. El endoscopio proporciona al cirujano una excelente visualización, que permite remover el disco herniado, eliminando la causa de síntomas en estos pacientes.
Asociado a la endoscopia, se efectúa la anuloplastia, la cual es un procedimiento que se basa en uso de láser, para ajustar y estrechar las fibras colágenas rotas del anillo fibroso, además elimina los receptores de dolor en el anillo fibroso destruye el tejido inflamatorio o de granulación, que crece dentro del anillo y alrededor de la raíz nerviosa, utilizando el endoscopio como vía de acceso. El anillo fibroso es la parte externa del disco y se compone de fibras concéntricas similar a la distribución de fibras radiales de una llanta, que protegen al disco intervertebral, participando además en la estabilidad de la columna lumbar. Así cuando el anillo fibroso se rompe y debilita por la hernia de disco, post a discoidectomia, se efectúa anuloplastia, que contrae o cierra las fibras rotas del anillo (en el sitio de la hernia), como respuesta al láser. De esta manera se previene la posible recidiva de una hernia de disco lumbar . Además los productos de degradación y demás residuos, de extraen mediante el sistema de succion- irrigación integrado al endoscopio.